Las vistas desde la terraza son impresionantes y el desayuno es excepcional. La atención del personal nos hizo sentir como en casa, y el billar fue un gran entretenimiento para relajarnos después de un día de esquí.

La ubicación es ideal para disfrutar de Sierra Nevada, además de perfecto para realizar excursiones, donde encontramos un ambiente familiar y tranquilo. La comida fue muy buena, definitivamente uno de los puntos más destacados de nuestra estancia. Mamá también aprobó el delicioso desayuno.

Mi mujer dice que el acceso a las instalaciones podría mejorarse para facilitar el movimiento con los niños.

Las vistas a la piscina son maravillosas y las habitaciones, acogedoras. Buena ubicación para esquiar y el trato del personal fue genial.

Pero, entre habitaciones deshechas y menos bombillas que en un camino de Santiago, ¡estaba casi más a oscuras que en una cueva!

Vistas impresionantes y buen trato

Al despertar, las vistas de las montañas nos dejaron sin aliento. La atención del personal fue excepcional, haciendo que cada momento fuera especial. El restaurante también ofrecía platos riquísimos.

La habitación era algo pequeña y el ruido del exterior a veces interrumpía la paz. Además, el acceso a las instalaciones podría mejorar, ya que parecía un poco limitado.

Esther nos sorprendió con un delicioso desayuno.

Vistas increíbles desde la habitación.

El hotel El Guerra fue una agradable sorpresa. Las vistas desde la terraza son impresionantes y la atención del personal fue excepcional, lo que hizo que mi estancia laboral fuera aún más placentera. Las habitaciones son acogedoras, bien equipadas y la comodidad de las camas fue destacable. Además, disfruté de un desayuno delicioso que me llenó de energía para el día.

El acceso a las instalaciones podría mejorar.

La pasta artesanal en el restaurante fue la estrella de la cena, disfruté cada bocado como si fuera una fiesta en el paladar. Las habitaciones son amplias y acogedoras, y la atención de Esther hizo que nuestra estancia fuera inolvidable. ¡La piscina fue el mejor lugar para relajarse después de un día de bici!

La habitación estaba un poco fría al llegar, y aunque el interior es algo anticuado, las vistas desde el balcón eran impresionantes. Al día siguiente, el desayuno no fue lo que esperábamos. tuvimos que esperar para que nos atendieran y se sentía un poco oscuro y desolado al principio. Pero al final, cada pequeño inconveniente se dulcificó con el ambiente acogedor del lugar.

Encantadora Escapada en la Montaña

La vista desde la habitación era impresionante y el acceso a las pistas de esquí muy conveniente. Disfrutamos mucho del desayuno, con una variedad de opciones que nos llenaron de energía para el día. Recomiendo preguntar sobre el billar, ya que es una excelente forma de relajarse después de esquiar.

Las vistas desde la habitación eran impresionantes y el entorno natural realmente te transportaba a otro mundo. El desayuno ofrecía una gran variedad y estaba delicioso, incluyendo opciones como cuscús que estaban espectaculares. Además, la atención de Esther, que se preocupó por nosotros y nos ofreció comida extra para llevar, hizo que nuestra estancia fuera aún más especial.

La calefacción en la habitación no era suficiente al llegar, y aunque no pasamos frío por la noche, entramos a un ambiente frío. noté que el desayuno podría tener un poco más de variedad.

la atención del personal es excepcional y hace que tu estancia sea aún más agradable. el restaurante ofrece platos deliciosos y bien presentados, perfectos para reponer energías después de un día de esquí. además, puedes alquilar equipos en el hotel sin complicaciones.

necesita un poco más de mantenimiento en las áreas comunes.

bueno pero con áreas de mejora

El desayuno fue una delicia, con opciones frescas y variados que nos dieron energía para todo el día. Las vistas de las montañas desde nuestra habitación fueron impresionantes y nos hicieron sentir en medio de la naturaleza. Además, la atención del personal, siempre amable y dispuesto a ayudar, hizo que nuestra estancia fuera más placentera.

La habitación estaba un poco fría al llegar, lo que afectó un poco la comodidad de nuestra estancia.

La cama era cómoda y las vistas espectaculares. Piscina exterior muy agradable. La habitación no estaba hecha al llegar.

La habitación era bastante acogedora, pero la verdad es que el ruido del ascensor era molesto. Además, hacía un poco de frío en el cuarto, pero el jacuzzi en la azotea era una maravilla. Las vistas eran increíbles. Aunque la ubicación está bien, entre Granada y Sierra Nevada, el ruido exterior afectaba la tranquilidad.